“NO ESTOY AQUÍ PARA INFORMALES A USTEDES SINO PARA SACRIFICARME POR LA CAUSA DE LA LIBERTAD”. Han pasado exactamente 200 años en que esta valerosa mujer “María Parado de Bellido “, fue el mayor ejemplo de lealtad a su nación, donde pudo brillar sus principios de fidelidad y respeto ante un pueblo sometido por el yugo español. Tierra que la vio nacer y morir para que hoy en día sea totalmente libre e independiente llamado PERÚ. Mujer que no cayó en el egoísmo para poder salvar su vida sino que la entrego para consolidar la independencia de nuestra nación. Es por ello que nosotras como Dominicas sanmartinianas debemos continuar la virtud de “LEALTAD” aquella que genera frutos como la fortaleza y honor en nuestro interior, y poder caminar en el sendero de luz y verdad. Dios quiere que hombres y mujeres sean leales a Dios a la familia y a su trabajo permitiéndonos construir una Iglesia sólida. ¡VIVA LA MUJER PERUANA, VALIENTE Y AGUERRIDA! ¡VIVA EL PERU!